Queridos amigos
el verano es un período del año muy hermoso, en el que se puede viajar, se puede pasar mucho tiempo afuera sin problemas de temperatura, de frío por los menos, es un período de vacaciones y de descanso. Además, en mi pueblo el verano es la estación del año más rica en eventos y actividades para toda la gente de todas las edades. De hecho en el verano muchas personas se trasladan desde las ciudades más cálidas en mi pueblo porque, al situarse en montaña, la temperatura es fresca y agradable. Muchos son los veraneantes que vienen de Roma por ejemplo o de otros lugares de Italia. A veces se trata de personas que en Gorga tienen parientes y que aprovechan las vacaciones para visitarlos. El Verano Gorgano empieza con la Fiesta de la montaña, una de las mayores atracciones de este período. Cada año, el último domingo de Julio se festeja la montaña, sus caminos, su naturaleza. Podría decir que se trata de una jira pero no es exactamente esto, sería restrictivo considerarla así. La Fiesta de la montaña es un día dedicado a los amantes de la naturaleza, de los animales. La cita es a primera hora, la mañana del domingo, en un lugar llamado Cesa Rocchitto, donde se encuentran unas guías, expertos conocedores de la zona, que acogen a los que quieren llegar al lugar donde se desarrolla la fiesta: monte Canai. Hay diferentes posibilidades: itinerarios para niños (más cómodos y breves), itinerarios para adultos (se sigue el camino principal por dos horas más o menos) y excursiones para los más expertos (más capilares, por los lugares más sugestivos de la montaña). Hay también personas que van a caballo. Cuando llega a la cima del monte, la gente se reune alrededor de una fuente, símbolo de Canai. A las once de la mañana se celebra la Santa Misa cerca de una estatua de Jesús que la comunidad gorgana había puesto allá hace unos veinte años. Es un momento muy intenso porque los árboles, el cielo, el agua de la fuente parecen participar con silenciosa devoción. Después de la Misa todas las personas eligen un lugar donde ponen una manta y se situan allá donde esperan el almuerzo. La comida es muy rica: cada año un grupo de mujeres se ocupa de preparar los platillos típicos de la tradición gorgana: pasta e fagioli (pasta con fríjol), carne de cerdo (sobretodo salchichas), quesos, dulces de almendras llamados mantovana y vinos producidos por unos hombres del pueblo con procedimientos transmitidos por los abuelos hace muchos años. No sé si es por haber caminado mucho, o por el aire de montaña que toda la gente come mucho y con más gusto que en su casa. Esto es lo que dicen siempre los participantes o sea, que esperan este día para poder comer como Dios manda.
Después de un necesario descanso empieza la parte de la jornada dedicada a los juegos: carreras con los caballos, competiciones de velocidad con el lazo usado como antaño para enlazar por los pies y la cabeza todo tipo de ganado, juego de bolsa para los jóvenes y ¡mucho más! Estas actividades nos hacen recordar la edad medieval en la que estos juegos eran muy practicados. Claramente durante todo el día se suceden los organilleros que alegran la permanencia en montaña.
Desde pocos años se fue afirmando otra tendencia: muchos jóvenes, hombres, incluso familias, se van a Canai unos días antes la fiesta con tiendas y sacos de dormir y allá esperan los festejos. Además la noche de vispera de la fiesta se puede disfrutar del karaoke y discoteca en los mágicos ambientes naturales de la montaña.
Esta es una iniciativa muy positiva porque, a pesar de ser muy antigua, cada año hay aspectos nuevos y atraentes y la participación es abundante.
Ele.
mercoledì 6 gennaio 2010
Iscriviti a:
Commenti sul post (Atom)
Nessun commento:
Posta un commento